
Ford Motor Company anunció esta semana un retiro masivo de vehículos, luego de detectar un fallo técnico que podría representar un riesgo de incendio. La medida afecta a cerca de 694.000 unidades, principalmente de los modelos Bronco Sport (2021-2024), Escape (2020-2022) y Kuga (2019-2024), todos equipados con motores de 1.5 litros.
De acuerdo con información presentada ante la Comisión de Bolsa y Valores de EE. UU., el problema radica en el sistema de inyección de combustible, donde algunos inyectores podrían presentar grietas que generarían fugas dentro del compartimento del motor. Este tipo de escapes, si se combinan con fuentes de calor como el motor o el sistema de escape, podrían provocar incendios, según advirtió la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA).
Como medida preventiva, Ford implementará una actualización de software en el módulo de control del motor mientras desarrolla una solución definitiva. Esta acción temporal busca reducir los riesgos mientras se concreta el arreglo completo.
La compañía estima que este recall le generará un costo cercano a 570 millones de dólares, que se verá reflejado en sus estados financieros del segundo trimestre de 2025.
Hasta ahora, no se han reportado accidentes, heridos ni víctimas relacionados con esta falla, y tampoco se ha confirmado si el llamado a revisión se extenderá a otros países donde se venden estos mismos modelos.